Al igual que comer chocolate es sinónimo de lucir un reguero de manchas marrones en la comisura de los labios, beber vino tinto va unido a teñir nuestros labios y dientes de un color rosado antiestético, así que una marca de vino tiene la solución a este problema.
Wino Sippers de Oenophilia es la solución que todos alguna vez hemos pedido después de beber una copa de vino: el vaso pajita que te impide acabar una comida con la comisura de los labios manchadas de vino, la lengua teñida y los dientes de un color diferente al natural.
Se trata de un vaso de cristal que lleva conexo una pajita (también de cristal) por la que beber el vino y obtener únicamente su parte positiva, que es su sabor y no su tinte.
Se trata de un conjunto de dos vasos por 24 dólares que, además de un curioso diseño, también están fabricados a prueba de derrames.