El arte de la pasta se eleva a una categoría superior con David Rovillo, el chef y doctorado que empezaría elaborándola en casa como un hobby, hasta acabar convirtiendo esa expresión artística en un trabajo a tiempo completo.
Los raviolis, fideos o sorrentinos se presentan como el lienzo en blanco de este ‘artista culinario’ que lleva a cabo intervenciones creativas con patrones multicolor creados a raíz de mezclas de tintes naturales.
Los animales, la naturaleza y los motivos indígenas venezolanos se entremezclan en su obra en la que decora la pasta con rayas de colores, lunares o diferentes motivos que podrían exponerse como piezas de arte en una galería.
En su archivo digital podemos encontrar diseños de un espagueti coral que evoca una serpiente rey escarlata, raviolis con refinadas rayas blancas y negras creados para Dolce & Gabbana o unos tortelli con patrones geométricos de colores similares a los de la obra de Mondrian.
La pasta artesanal puede llegar a costar unos 400 euros el kilo, teniendo en cuenta el valor de todo el proceso creativo, los colorantes naturales y los ingredientes necesarios para llevarlas a cabo.
