El restaurante japonés del sur de Tenerife se vinculó a la prestigiosa Maison francesa para celebrar el viernes 17 de mayo un evento oficial de la marca por primera vez en las Islas, con el singular formato de una exclusiva barra montada para la ocasión en el jardín, solo para diez comensales.
Kensei, liderado por el chef Víctor Planas, y situado en el hotel Bahía del Duque, se vinculó a esta vez a la prestigiosa marca de champán Dom Pérignon para ofrecer juntos y comandado por el sumiller de Kensei, Rodrigo González, un exclusivo maridaje con botellas únicas y especialmente escogidas para este debut oficial de la marca en un evento en las Islas.
La experiencia, que se llevó a cabo en formato Omakase, en el incomparable marco del jardín del restaurante y solo para diez comensales, armonizó el conocimiento y la experiencia del chef Víctor Planas a la hora de trabajar la cocina japonesa contemporánea con la privilegiada oportunidad de catar las mejores botellas y añadas de Dom Pérignon. Cabe añadir que estos champanes especiales de Dom Pérignon se quedarán en el restaurante hasta agosto como opción especial por copas.
‘Kensei Omakase Wine Sessions se convierte, para nuestros clientes, en una oportunidad irrepetible de probar lo bien que se asocia un champán así con las mejores materias primas como el Atún Balfegó, la gran lubina atlántica de Aquanaria o los mariscos frescos de Lobsterfish Canarias que en esta ocasión apoyan también la experiencia’, expresa González.
A lo que prosigue: ‘en mi opinión, destacaría botellas clave en la historia de la Maison francesa como por ejemplo, Dom Pérignon Vintage 95, denominada como la quinta esencia del estilo Dom Perignon, procedente de una añada marcada por su balance y que, según los expertos, roza la perfección. En cuanto a Dom Pérignon P2 2002, la obsesión de parar el tiempo y hacer un champagne infinito, Richard Geoffroy, Director de la Maison, se vale en este caso de una crianza en botella extrema para encapsular una de las añadas más completas de la historia de la región francesa o Dom Pérignon Rosé 2008 un rara a vis, un rosado espectacular que aporta finura y estructura al mismo tiempo, la complejidad de uno de los mejores rosados de la región de Champagne en otra de sus añadas excepcionales.’
