Fácil, rápido y barato. Pocos platos como el arroz evocan mayor felicidad y seducen tanto a los comensales. Pero eso no otorga patente de corso al chef.
Fácil, rápido y barato. Pocos platos como el arroz evocan mayor felicidad y seducen tanto a los comensales. Pero eso no otorga patente de corso al chef.