No hay Madrid sin Metro. Porque quién no ha recorrido el mítico transbordo de Diego de León, se ha “enamorado” de la persona que tenía delante al estilo James Blunt en “You’re beautiful” o se ha subido en la dirección incorrecta de la línea 6. A golpe de buen servicio y años, el Metro de Madrid se ha convertido en una parte imprescindible de la ciudad. Un entramado de vías subterráneas que desde hace más de 100 años se anuncia en superficie con el característico rombo rojo para no dejar a nadie en tierra.
Aprovechando la señalética identitaria y la vinculación sentimental de los madrileños con este emblema, hace dos años la compañía pública madrileña se propuso relanzar su línea comercial con nuevos productos textiles, de papelería o para el hogar. Y desde entonces no ha dejado de acumular éxitos de ventas.
Y es que la marca de Metro arrasa con cada lanzamiento, como ha ocurrido con la botella termo Closca; el paraguas, que se ha convertido en el producto más vendido de la Tienda esta primavera con motivo de las recurrentes lluvias de los últimos meses; las zapatillas que Metro lanzó por su 105 aniversario y cuya primera tirada se agotó en apenas ocho horas; la edición exclusiva del mítico cubo de Rubik; o el juego de equilibrio Megatransbordo. Ahora, con motivo de la celebración del 2 de mayo, se suma un nuevo producto al catálogo de Metro: la sudadera inspirada en la ciudad. El diseño de esta prenda rinde un homenaje particular a la forma de vida ma- drileña. Diseñada junto a Tito Cus- toms –con quien Metro ya colaboró en el boceto de sus zapatillas–, en la sudadera se destaca el eslogan ‘Madrid x Metro’ y el dibujo de la gran M. Además, incorpora una novedosa tecnología textil, ya que cambia de apariencia cuando recibe el calor del sol. Esta pieza, como todas las demás, puede adquirirse en las tiendas físicas de Sol y Plaza de Castilla y en la página web latiendademetrodemadrid.com.
La sudadera ‘Madrid x Metro’ cambia de apariencia cuando recibe el calor del sol
En total son ya 120 referencias las que acumula Metro, con cuyas ven- tas ha multiplicado la facturación por diez desde el 2017 (primer año tras la creación de la tienda online de Metro). Los continuos lanzamientos en forma de camisetas, altavoces, auriculares, tazas, bolígrafos, delantales, tote-bags o abanico han generado un incremento de la facturación de un 33% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. En estos años, uno de los hitos fue la memorable edición ‘Muy Metro’, dirigida a los más enamorados del suburbano madrileño que se componía de las lamas de estaciones, rombos o cortes de vía -llegándose a pagar hasta 1.000 euros por uno de sus viejos rombos retirados de las estaciones–. O las colaboraciones con marcas de prestigio como BIC, Rubik o Fournier.
Lo mejor de todo es que esto no tiene intención de parar. El verano traerá una nueva colaboración con Polar Box para dar vida a una nevera de playa inspirada en las líneas de metro y la apertura de una nueva tienda física en la estación de Ópera de 70 metros cuadrados, que se suma a las de Sol y Plaza de Castilla. Y es que con esta buena marcha en las ventas no se descarta que desde el Metro de Madrid se llegue, algún día, al cielo.
