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Un Blancpain para explorar el fondo submarino y salvar los océanos

El Fifty Fathoms Act 2 – Tech Gombessa que Blancpain ha alumbrado este año es una máquina para profesionales como Laurent Ballesta, que ayuda a cuidar los mares.

Este año al que estamos dando carpetazo ha sido para la relojera suiza Blancpain el del homenaje a su Fifty Fathoms. El famoso modelo, arquetipo de los relojes submarinos, ha cumplido 70 años, y la casa lo ha celebrado entregando tres series especiales a mayor gloria del susodicho. Hoy nos detenemos en la segunda de ellas, de nombre Fifty Fathoms Act 2 – Tech Gombessa (la versión más profesional del trío), que vio la luz el pasado febrero, porque puso en el mapa a la expedición Gombessa, gracias a la cual el mundo líquido es un lugar mejor.

Gombessa es el nombre que dan en Mozambique a un pez prehistórico, el celacanto, que el fotógrafo, explorador y biólogo marino francés Laurent Ballesta ha buscado en varias expediciones financiadas por Blancpain. La conservación de los océanos ha sido una de las máximas de la relojera del grupo Swatch en los últimos 20 años. No en vano, Jean-Jacques Fiechter, que fue director ejecutivo de la compañía y artífice del Fifty Fathoms en 1953, era aficionado a observar el fondo marino. Y también lo es su actual presidente y consejero delegado, Marc A. Hayek. Por eso la histórica relojera se ha enrolado en varias misiones submarinas y se ha asociado con líderes y organizaciones clave en la materia, con tres objetivos: aumentar la visibilidad de la belleza de los océanos, apoyar la investigación científica e implementar medidas eficientes de conservación.

Este 2023, además de ser el del 70 cumpleaños del Fifty Fathoms, ha sido el del décimo aniversario de las expediciones Gombessa, que se centran en el estudio de algunas de las criaturas y fenómenos marinos más raros y esquivos de la Tierra. En sus incursiones subacuáticas, Laurent Ballesta bucea para fotografiar peces como el celacanto, captar visiones de otro mundo bajo el hielo antártico, observar el frenesí alimentario de un tiburón nocturno y vivir bajo presión durante un mes para desentrañar los secretos de las profundidades del Mediterráneo.

Su última misión, la Tamataroa, le llevó junto a Blancpain a la Polinesia Francesa para examinar al gran tiburón martillo, una especie en peligro crítico de extinción, con un proyecto de la Mokarran Protection Society y el equipo Gombessa. Ese fue el punto de partida para el lanzamiento del Fifty Fathoms Act 2 – Tech Gombessa, un reloj que ofrece hasta tres horas de inmersión, por lo que resulta apto para explorar el fondo marino sin prisas. Fabricado en titanio de grado 23 (el más puro), mide 47 mm de diámetro y 14,8 mm de grosor, e incorpora una válvula de escape de helio, indicada para el buceo de saturación con gas respirable a base de helio, propio de expertos submarinistas. Con una hermeticidad de 30 bares (unos 300 metros), este ejemplar es idóneo para las futuras excursiones sumergibles de Gombessa y Blancpain.