A una reina se le da bien todo. Y dicha regla se tenía que aplicar a la cantante de oro de las últimas décadas Taylor Swift ( West Reading, Pensilvania,35 años), quien tras anunciar el lanzamiento de su nuevo álbum The Life of a Showgirl -a la venta el próximo 3 de octubre-, ha declarado su nueva pasión: el pan de masa madre.
Esta oleada de confesiones se produjeron en el pódcast New Heights de su novio Travis Kelce y cuñado, Jason Kelce. Una detrás de otra, primero fue la revelación de la portada de el número 12 en su discografía y continuó con la confesión relacionada con harina y horno, que también dio mucho de qué hablar.
La artista contó que está completamente obsesionada con la panadería casera, a la que dedica buena parte de su tiempo a experimentar con sabores como arándanos con limón, canela en espiral, canela con pasas y hasta una versión funfetti especial para las hijas de Jason Kelce, a las que les encantan las virutas de colores.
Continuó diciendo entre risas que sus hobbies parecen sacados del siglo XVIII, ya que también cose y pinta, y que cada seis meses se obsesiona con algo nuevo en la cocina.
Su novio, Travis Kelce, no ha dudado en celebrar su talento y asegurar que es “el hombre más afortunado del mundo”. La artista incluso envía sus panes a amigos para recibir comentarios y mejorar las recetas. Tanto se ha involucrado en este mundo que pasa horas leyendo blogs de masa madre y probando técnicas de fermentación, algo que la ha llevado a sentirse parte de una comunidad oculta de panaderos apasionados.
Durante la charla, Jason Kelce le propuso un nuevo reto culinario: crear una Pop-Tart de naranja inspirada en el próximo álbum de Swift, The Life of a Showgirl. La idea, con mermelada y extracto de naranja, conquistó a la cantante, que no dudó en aceptar el desafío. Entre panes, virutas de colores y nuevos experimentos muy dulces, Swift ha dejado claro que su creatividad no se limita a la música: también sabe conquistar a sus personas más cercanas y fans desde la cocina.