Cómo el tamaño de una taza puede cambiar tu gusto por el café

¿Te has preguntado alguna vez por qué existen cafeterías que sirven cafés tazas y/o vasos del tamaño de tu cabeza? Pues atento porque un nuevo estudio demuestra que la altura y el diámetro de un vaso tiene mucho que ver con las expectativas de las personas respecto al sabor, el aroma, la temperatura y el precio del café.

El próximo número de marzo de la revista científica Food Quality and Preference tiene algo importante que contarnos respecto a las sensaciones de los consumidores a la hora de pedir un café en un local. Y lo sabemos gracias a un artículo publicado por la web Refinery 29, quien ha tenido acceso a ciertos datos del estudio y que ahora comparte con el resto de sus lectores.

En él se pidió a 300 voluntarios en China, Columbia (Nueva York) Reino Unido que colocaran en un pantalla fotos de distintas tazas en respuesta a una serie de preguntas que se les dieron. Para ello, los investigadores pidieron que la disposición de las mismas fuese en orden de aroma, amargura, energía (esto es, cómo afecta la cafeína), temperatura, intensidad, gusto individual, dulzura y cuánto estarían dispuestos a pagar. ¿Cuál crees que fue el resultado? Los sujetos de los tres países esperaban que el café en tazas más cortas y más estrechas fuese más amargo, intenso y aromático mientras que el café servido en tazas con un diámetro mucho más ancho fuese más dulce. Los sujetos de Columbia y del Reino Unido estaban dispuesto a pagar más por tazas más grandes y altas mientras que los sujetos chinos pagarían lo mismo por todo lo anterior.

Así que ya sabes, si estás pensando en montar una cafetería o invitas a tus amigos a tomar el café en casa sirve tazas grandes para los que les guste el dulce y guarda las tazas pequeñas para los que prefieran mayor intensidad.