Toma Nota

Pan con nueces y trigo sarraceno

Original de Asia, el trigo sarraceno se ha convertido en un ingrediente estrella en la repostería. Es un pseudocereal con numerosos nutrientes mucho más saludables que los propios cereales ya que, entre sus principales características, destaca su alto valor proteico. No contiene gluten, es rico en fibra por lo que ayuda a regular la flora intestinal y el colesterol y, además, está recomendado para tratar casos de depresión y ansiedad.

Hoy, la editorial Lunwerg, comparte con nosotros una receta de su libro Panes Caseros con el que queremos inspirar a los más cocinitas a elaborar pan (del bueno) en casa. Toma nota.

Ingredientes:

  • 450 g harina de trigo T-65
  • 50 g de harina de trigo serraceno
  • 310 ml de agua
  • 20 g de masa madre deshidratada (o 150 g de masa madre fresca)
  • 8 g de sal
  • 1 cucharadita de café de azúcar
  • 100 g de nueces peladas

Modo de preparación:

Mezclar todos los ingredientes, salvo las nueves, añadiendo el agua poco a poco y luego amasar la masa durante 10 minutos, trabajándola con las palmas de las manos hasta que esté elástica y se despegue de los dedos. Al final del amasado, añadir las nueces peladas.

Poner la masa de pan bien enharinada en una ensaladera bastante honda y enharinada, tapar con un trapo húmedo y reservar en un lugar templado (entre 22 y 26 °C) protegido de las corrientes de aire. Dejar reposar entre 1 hora y una hora y media. Sacar la masa de pan y amasarla con cuidado durante 1 minuto, luego proceder a darle forma de barra y formar una corona dejando un agujero ancho en el centro (al subir reducirá). Colocarla sobre la bandeja del horno enharinada y dejar reposar de nuevo durante 1 a 1 , protegida de las corrientes de aire y a una temperatura de entre 22 y 26 °C.

Precalentar el horno a 220 °C, calor tradicional, durante 10 minutos. Hacer unos cortes en la masa de pan en forma de cuadrado. Hornear inmediatamente, echar enseguida un poco de agua hirviendo en la grasera del horno para que se forme vapor de agua y luego cerrar la puerta. Dejar cocer de 30 a 40 minutos sin abrir el horno. Dejar enfriar sobre una rejilla.