El papel del reconocido chef Dabiz Muñoz en un supuesto belén navideño, del que pudiera formar parte, sería el del rey mago de las comidas sin límites. Ni incienso, ni oro, ni mirra. El propietario de restaurantes como DiverXO, StreetXO y proyectos como GOXO y RavioXO sería la figura que brindaría al niño Jesús con una caja navideña de lo más creativa. Justo lo que ha hecho estas Navidades de 2025 a sus clientes de GOXO, y aunque no seamos ningún mesías religioso, desde luego que vamos a ver la luz divina si la probamos.
Se trata de una edición limitada pensada para celebrar Nochebuena o Nochevieja en casa, pero con un menú de alta cocina diseñado para el exceso y disfrute. Su precio, 250 euros, confirma que la propuesta no busca discreción, sino ofrecer una experiencia rotunda que lleva el sello inconfundible del universo XO.

El menú, fruto de meses de pruebas del equipo de GOXO, propone un viaje culinario que conecta Madrid con Asia y el Magreb. Está concebido para dos personas “con mucha hambre”, según la propia marca, y se envía a domicilio a cualquier punto de la península. La caja presenta cuatro elaboraciones que conforman un recorrido completo de principio a fin, diseñado para disfrutar sin salir de casa pero con la sensación de estar en uno de los restaurantes del chef madrileño.
La primera toma de contacto llega con una sopa de letras reinterpretada con foie, jamón Joselito y los “wontolonis”, una mezcla entre ravioli y wonton. Le sigue un centollo estofado con jugo al jengibre, bechamel de pimienta kampot, mejillones escabechados y migas de pan frito japonés, un guiño directo a la complejidad y a las capas de sabor por las que es conocido el chef.
Después, espera el plato principal, uno de los grandes reclamos de esta época del año, la paletilla de cordero lechal asada durante 24 horas en horno de encina y aromatizada con especias del Sáhara y rosas. Este milagro gastronómico tan navideño está acompañado por una milhoja de patata con bacon y trufa, además de un cous cous salteado al wok con mango y limón marroquí. Una propuesta que parte de los clásicos navideños, pero reubicada en el territorio Muñoz, donde la potencia, la técnica y la vanguardia son sus principales adornos.
Para cerrar, la caja recupera un icono del mundo XO: el pastel fluido de chocolate blanco y yemas de RavioXO, acompañado de mini magdalenas de mantequilla tostada y vainilla. Un postre pensado para el disfrute absoluto, más cercano al hedonismo que a cualquier intento de contención. Todos los platos llegan casi terminados y se rematan en casa con instrucciones sencillas disponibles en la web, donde GOXO insiste en seguir las pautas de regeneración para obtener un resultado lo más cercano posible al servicio de restaurante.
La caja navideña de GOXO, disponible en unidades limitadas y con reserva previa obligatoria, mantiene la filosofía que ha hecho célebre al proyecto de delivery de Dabiz Muñoz: alta cocina llevada al formato doméstico, mezclada con street food, influencias internacionales y la creatividad sin reglas del chef. Esta edición vuelve a reivindicar el “hedonismo salvaje en casa”, el lema de GOXO que demuestra que la Navidad también puede servirse en bandejas de oro… siempre que estas sigan la pauta de la estrella polar de Dabiz Muñoz.