ALICANTE, 18 (EUROPA PRESS)
Las eurodiputadas socialistas valencianas Sandra Gómez y Leire Pajín han alertado este viernes sobre «las consecuencias nefastas para la Comunitat Valenciana que tendría el presupuesto a largo plazo que ha presentado la Comisión Europea» para «los agricultores y pescadores».
«El peor de los pronósticos se ha hecho realidad y es que la Comisión Europea, del PP, ha confirmado la supresión de la Política Agraria Común (PAC), la política pesquera y los fondos de cohesión y desarrollo y su sustitución por un sobre único que va a mermar los fondos», han apuntado.
En un comunicado, han subrayado que «esto tendría unas consecuencias nefastas para la Comunitat Valenciana, porque afectaría directamente al campo valenciano», a su sector primario, al de los cítricos, al pesquero y a la innovación.
Gómez y Pajín han pedido al PP español y «especialmente» al eurodiputado ‘popular’ Esteban González Pons que hagan «rectificar» a sus compañeros europeos y recuperen «una política que es vital» para el desarrollo de la tierra y la sostenibilidad del campo.
Las eurodiputadas también han alertado de la «reducción» de las políticas de cohesión, los proyectos y fondos europeos de los que son receptores las comunidades autónomas y los ayuntamientos valencianos, «que van a quedar muy perjudicados en su inversión pública».
«El impacto sería importantísimo, ya que estos fondos son un motor de desarrollo y de inversión pública imprescindible para muchos municipios», han aseverado, para luego hacer un «llamamiento a la movilización» de los consistorios y «las personas volcadas con el desarrollo local para exigir una rectificación al PP y que recupere las políticas de cohesión».
Además, Pajín y Gómez han mostrado su «preocupación extrema por la renacionalización de los programas, lo que va a suponer menos Europa y más fragmentación», y se han comprometido a «pelear duro» para que los agricultores y pescadores valencianos «tengan el acompañamiento que merecen para lograr un marco financiero acorde con los retos, que no esté condicionado por la austeridad», algo «ya comprobado en el pasado», cuando «pagaba caro la sociedad y especialmente los sectores más vulnerables».