Entre luces y sombras, Michael Jackson sigue siendo uno de los artistas más destacados de todos los tiempos, que generó un fanatismo ilimitado que durará para siempre.
Durante los años en los que se erigió como “el rey del pop”, el icono musical desarrolló una fuerte obsesión por el pollo frito de KFC. Jackson lo devoraba constantemente entre bastidores, e incluso, se comenta que en algunas ocasiones se escapaba de reuniones para ir a comprar a alguno de sus establecimientos.
Dependiendo del desayuno, la comida o la cena, la estrella lo acompañaba de una cosa u otra, normalmente junto a una copa de vino blanco. Para desayunar, Jackson solía disfrutar del pollo de KFC con huevos revueltos, puré de patatas, maíz y galletas, así como salsa, mantequilla en spray y mermelada de fresa.
Para comer o cenar, simplemente suprimía los huevos revueltos de la ecuación. En cualquier caso, el artista llegó a decir que el pollo de KFC era su comida favorita.
La afición de Michael Jackson fue tan grande que incluso se haría amigo de Magic Johnson gracias a su amor compartido por el pollo frito. Al parecer, el cantante invitaría a la leyenda del basket a cenar, sirviéndole un plato elaborado de pollo y arroz, mientras él se limitó a comer un cubo de KFC. Johnson acabaría comiéndose el pollo frito junto a Jackson, y aceptando la propuesta del artista de protagonizar el icónico videoclip de ‘Remember The Time’.