El Foro Mundial del Vino, ‘Wine Land 2023’, que se celebra en dos jornadas, una este miércoles y otra el 29 de noviembre, en el Centro de la Cultura del Rioja, aborda, con ponencias de una treintena de enólogos y especialistas del mundo del vino, cuestiones como la orientación hacia lo ecológico del sector y acerca de la diversificación necesaria.
La inauguración de la misma ha corrido a cargo del alcalde de Logroño, Conrado Escobar, y de la vicepresidenta del Club de Marketing -organizadores del evento-, Lola Zuazo.
El alcalde de Logroño, en su intervención, ha puesto en valor el albergar «un evento de estas características» que viene a tratar «el porvenir» del sector del vino, y los «desafíos» que tiene este negocio.
Escobar ha destacado que la capital de La Rioja cuenta con ocho bodegas «repartidas por este extraordinario territorio», sin olvidar los calados que «resumen parte de nuestra historia». Finalmente, ha resaltado el Centro de la Cultura del Rioja como espacio para debatir sobre «el futuro del Rioja».
Por su parte, Zuazo ha mostrado el «compromiso» del Club de Marketing con el sector del vino, algo que ha señalado evidencia esta iniciativa que «va a tratar de dos cuestiones sumamente importantes como son la viticultura sostenible y el cambio climático, así como la diversificación de mercado».
La vicepresidenta del Club de Marketing ha destacado que «las últimas crisis nos han puesto de manifiesto que la planificación a largo plazo tiene que ser mucho más breve y tener un ojo en el presente y otro en el futuro».
AUMENTAR LA AGRICULTURA ECOLÓGICA
En el foro participa el catedrático de Enología de la UR y viticultor, Juan Carlos Sancha, que ha explicado que «es fundamental el desarrollar mucho más la agricultura ecológica en La Rioja, que está por debajo del 4 por ciento, cuando en otras zonas de España, por ejemplo, es un 13 por ciento».
Para Sancha, por tanto, «necesitamos incrementar esa actitud de los viticultores y de las bodegas hacia prácticas más sostenibles en la agricultura», así como «es fundamental preservar la biodiversidad».
Además, ha apuntado que hay otra necesidad como es «preservar el viñedo viejo», sin olvidar que «hay que apostar y desarrollar nuestras variedades tradicionales y de conservar, insisto, esas viñas viejas, precisamente para dejar a nuestros hijos más genes de vid que lo que nosotros estamos heredando, o por lo menos los mismos».
Ha abogado, finalmente, también por «dejar de utilizar herbicidas en el viñedo y sustituir los abonos químicos por abonos de tipo natural, además de utilizar productos fitosanitarios naturales desde el punto de vista que no sean sintéticos».
Otro de los ponentes, el director y fundador de la empresa Greenize Projects, Antonio Cañas, ha recordado que desde su compañía, teniendo en cuenta que Rioja «debe ser siempre referente», se puso en marca
«una guía de buenas prácticas en economía circular para la innovación accesible en la página web y poniendo en valor todas las buenas prácticas que se han ido haciendo en toda la cadena de valor del vino», con vista a que fuera «un pilar de apoyo para todo aquel que quiera emprender camino».
Cañas ha apuntado que el sector del vino «debe involucrarse en todos los cambios que debemos hacer a todos los niveles para adaptarnos al cambio climático y a lo que nos va a venir». «Hemos tenido un verano muy caluroso, y esto va a afectar también a las cosechas y el mundo del vino, en su parte productiva, en su parte de sensibilización, debe dar su granito de arena por esta transición ecológica».
Ante ello, ha indicado que «tenemos que trabajar en temas de energía, en materiales, en pesticidas, en consumos de agua, en suelos, en una serie de aspectos ya regulados, y trabajar en ampliar toda la adaptación ecológica que debe llegar a ser un beneficio vigente en 2030».