Heineken ha compartido las medidas que le han permitido alcanzar el balance de su huella hídrica directa en 2022, que giran en torno a la digitalización, la colaboración y la puesta en marcha de acciones para la concienciación de la sociedad en la lucha contra la escasez de agua en países como España.
Además, la cervecera alcanzó este objetivo casi una década antes de la fecha propuesta a nivel global, a través de la digitalización e implementación de un sistema de alarmas, control y análisis de consumos diarios para la detección y solución de sobreconsumos en las cuatro fábricas de Heineken en España.
Así, según datos de la empresa, Heineken consume un 35% menos de agua que en 2008, al tiempo que trabaja para utilizar sólo 2,6 litros de agua por cada litro de cerveza elaborado para 2025, lo que supondría una reducción del 47% de agua.
También han implementado sistemas de recuperación y reutilización para la depuración de aguas residuales y así devolverlas al entorno, con lo que han obtenido una tasa de reutilización de 0,21 litros para procesos de limpieza.
Por otro lado, Heineken ha contribuido a la restauración del equilibrio natural del ciclo del agua gracias a varios proyectos en Doñana, la Albufera valenciana o el río Jarama (Madrid) para retornar el agua a las cuencas de los ríos que abastecen sus cuatro fábricas.
Gracias a ello, han retornado más de 1.900 millones de litros de agua cada año, que además de mejorar la cantidad y calidad disponible, contribuye a la recuperación del medioambiente.