A este respecto y tras señalar que la Junta refuerza de esta forma su apuesta por el campo cordobés, con un «presupuesto récord» de 160 millones de euros para el año que viene, Molina ha subrayado que «Andalucía vuelve a tener estabilidad, y eso es esencial para el campo», lo cual es posible porque la comunidad autónoma contará, de nuevo, con unos presupuestos aprobados que entrarán en vigor el 1 de enero.
Para Molina, «contar con unas cuentas en vigor desde el primer día del año aporta confianza y permite a agricultores, ganaderos y cooperativas planificar inversiones y proyectos sin incertidumbre» y, en este contexto, ha destacado que la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural dispondrá en 2026 de «un presupuesto récord de 1.971 millones de euros, que alcanzará los 3.539 millones con los fondos del Fondo Andaluz de Garantía Agraria».
Es, según ha señalado, «el departamento más inversor del Gobierno andaluz, con más de 1.500 millones destinados directamente a inversiones reales, lo que se traducirá en más ayudas, más infraestructuras y más oportunidades para el sector agrario, ganadero y pesquero».
En relación a Córdoba, Molina ha indicado que será una de las provincias más beneficiadas, «con una inversión que ascenderá a 160 millones de euros, 27 millones más que en 2025». Según ha resaltado, «Córdoba contará con más apoyo, más inversión y más futuro; la apuesta de la Junta de Andalucía por el campo cordobés es firme y sostenida».
MÁS EN AGUA Y MODERNIZACIÓN
Por su parte, el delegado territorial Francisco Acosta ha explicado que «uno de los grandes pilares del presupuesto será la inversión en agua y abastecimiento, con 63 millones de euros destinados a mejorar infraestructuras fundamentales en municipios de la provincia». Entre las actuaciones previstas ha destacado «los 11,7 millones de euros previstos en Rute, 8,9 millones en La Carlota, 3,8 millones en La Rambla y Montalbán, 1,6 millones en Santa Eufemia, 817.000 euros en Almodóvar del Río y más de 650.000 euros en Pozoblanco».
«Estas obras –ha resaltado– no son simples inversiones, pues significan salud ambiental, sostenibilidad y garantía de futuro para nuestros pueblos», a lo que se une que el presupuesto incluye 33,6 millones, frente a los once de este año, para «reforzar la rentabilidad y modernización de las explotaciones, apoyar la incorporación de jóvenes agricultores, fomentar prácticas sostenibles y mejorar la sanidad y el bienestar animal. Son más recursos para que nuestros agricultores y ganaderos sigan produciendo con calidad y con futuro».
A nivel regional, Acosta ha recordado que «se incrementan un 40% las ayudas agroambientales y forestales, hasta los 238 millones; que se destinan 24,9 millones al bienestar animal, un 28% más, y que las ayudas para seguros agrarios alcanzan los 16,6 millones de euros, más del doble que en 2018».
Además, más de cuatro millones de euros se dedicarán a la modernización y promoción agroindustrial, y el Gobierno andaluz movilizará 22,5 millones de ayudas extraordinarias para compensar daños por plagas y enfermedades, como el mildiu, el algodoncillo, el parvispinus o la lengua azul.
Por último, el delegado territorial ha resaltado los 79,2 millones de euros destinados al desarrollo rural a través de los Grupos de Desarrollo Rural. «Estos fondos permiten impulsar el emprendimiento, la innovación y proyectos que fijan población y generan empleo en nuestros pueblos», ha señalado.
Acosta ha concluido asegurando que «los presupuestos de 2026 son unas cuentas realistas, ambiciosas y comprometidas, que priorizan el agua, el relevo generacional, la modernización de las explotaciones y la sostenibilidad del territorio», y ha afirmado que «la Junta de Andalucía seguirá junto al sector agrario, escuchando, invirtiendo y actuando con hechos, no con promesas».