Reportajes

Cómo se representa la gastronomía en el universo cinematográfico de Wes Anderson

Proyectamos las mejores secuencias culinarias dirigidas por Wes Anderson.

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El director estadounidense que ha trascendido en la cultura audiovisual por su visión disruptiva y ligeramente surrealista ha servido en sus películas infinidad de escenas gastronómicas repletas de fantasía y excentricidad.

La narrativa visual y la iconografía de Anderson han incluso inspirado la creación y el diseño de un sinfín de restaurantes, que evocan su estética y sus espacios en los que recrear algunos de los mejores diálogos que guardan sus secuencias culinarias; las cuales a menudo se han utilizado como puntos clave de la trama para enfatizar el drama suspendido entre tonos brillantes y elementos kitsch.

Hacemos un visionado superficial por algunos de esos episodios clave con el fin de comprender la totalidad del bufé audiovisual que despliega en el cine uno de los grandes autores del séptimo arte.

El Gran Hotel Budapest

Gran parte de esta película se presenta como una trama gastronómica continuada, ya que se desarrolla a través de una historia contada durante una comida entre un señor mayor, propietario del hotel, y un joven escritor. Sin embargo, prevalece una escena en la que unos reclusos endurecidos cenan delicados pasteles en su celda de la cárcel.

En este sentido, Monsieur Gustave H. ha sido falsamente encarcelado por el asesinato de su anciana y poderosa amante, y tras realizar su trabajo matutino sirviendo papilla a los residentes del Checkpoint 19, entrega una cortesana ilícita au chocolat de la pastelería Mendl a sus amigos Pinky, Wolf, Günther y Ludwig.

Moonrise Kingdom

Cuando Suzy Bishop y Sam Shakusky escapan de sus ‘hogares’ para aventurarse en el mundo de Wes Anderson como exploradores, ella lleva un gatito en una cesta con un montón de comida para alimentarle. Una panorámica revela que su mascota sólo consume comida para gatos de la marca ‘All Fish Cat Food’.

Más allá de esa secuencia, existe otra memorable que representa el deseo del protagonista de ser desesperadamente adulto. En ella, el capitán Sharp sirve una sencilla comida a base de salchichas fritas y tostadas, y ofrece a Sam una cerveza. Sam vierte entonces el último trago de un vaso de leche en un cenicero y acepta.

Academia Rushmore

Max Fischer, un estudiante de instituto que asiste a la prestigiosa Academia Rushmore mantiene una cena con su enamorada y profesora la Sra. Cross, su novio, el Dr. Peter Flynn y su viejo amigo y socio Herman Blume. Ebrio con un whisky con soda y celoso del Dr. Flynn, Max comentará de manera sarcástica su ‘bonito uniforme de enfermero’.  

The Life Aquatic

En uno de las últimas escenas que conforman The Life Aquatic, Alistair Hennessey y Bill Ubell se relajan con un café expreso y una copa de Campari, respectivamente, a bordo del Belafonte, el buque de investigación de Zissou. Hennessey se da cuenta de que la cafetera en uso procede de su propio barco de investigación, lo que resulta desconcertante. Pero los espectadores, y Bill, saben que Zissou robó la cafetera, entre otras muchas cosas.

‘¿Es esta mi cafetera exprés?’, pregunta Hennessey. pregunta Hennessey. ‘¿Qué es? ¿Cómo has conseguido mi cafetera exprés?’. Ubell, ya despreocupado por cualquier actividad ilegal que Zissou haya podido cometer durante su proyecto, responde: ‘Bueno, eh, la hemos robado, joder’.

Viaje a Darjeeling

En el vagón restaurante de The Darjeeling Limited se suceden asimismo una serie de secuencias culinarias clave, como una en la que se sirve una suntuosa bandeja de aperitivos salados, representados como alimentos asombrosamente deliciosos. En ese contexto, empiezan a surgir tensiones que acabarán provocando su expulsión del tren tras un incidente con un spray de pimienta.

Fantastic Mr. Fox

En la primera película en stop motion del cineasta abundan las escenas cómicas en las que los zorros disfrutan de platos sofisticados que comerían los humanos de la élite. Los zorros son, en su mayoría civilizados, pero una vez que comen, se vuelven salvajes.

En otra escena animada, el Fantástico Sr. Zorro termina con unos amigos colándose en un supermercado para darse un festín. A instancias de su hijo, el Sr. Fox brinda con una comida a base de zumo de manzana de caja, chicharrones de ganso sintéticos, menudillos de pichón artificial y manzanas de aspecto falso antes de una noche de baile.