Así lo ha explicado la entidad en la reunión entre la Unión Europea y Turquía por la avellana celebrada este lunes, en la que también ha manifestado que estas cifras «son muy inferiores a las 8.000 toneladas de una campaña media».
La FCAC apunta que la producción de avellana en España se concentra en Catalunya, donde buena parte de los cultivos «han sufrido mucho en los años de sequía» y que todavía arrastran sus efectos pese a que este 2025 ha sido más lluvioso.
Sin embargo, el responsable de frutos secos de FCAC, Josep Pere Colat, ha celebrado que aunque la cosecha de avellana se prevé escasa, será «de buena calidad».
«El sector necesita un revulsivo que cambie la situación para garantizar agua de calidad, variedades adaptadas al cambio climático y técnicas de control eficientes para las plagas emergentes», ha añadido.