Entre otros puntos, permitirá evaluar los efectos microclimáticos y su impacto en la productividad y resiliencia de la viña frente al aumento de temperaturas.
La planta se ha instalado en la viña ecológica Mas Rabell, ubicada en Sant Martí Sarroca (Barcelona), y ocupa una superficie de 1.000 metros cuadrados con paneles solares elevados a cinco metros de altura, que permite el paso de una máquina vendimiadora por debajo y facilita la automatización de la vendimia.
La directora de Innovación y Conocimiento de Familia Torres, Mireia Torres, ha explicado que el proyecto sirve para «explorar nuevas formas» de adaptación de energía limpia, y que las placas proporcionan sombra a los árboles y les protegen de la insolación directa en verano.