Esta es una de las medidas que se han propuesto en la reunión de las comisiones de cogestión del Plan de Gestión de la Pesca Artesanal de las Pitiusas y del Plan de Gestión para la Pesca con Artes de Tirada Tradicionales, que este lunes han analizado los resultados de la última temporada y han debatido propuestas para avanzar hacia una pesca «más sostenible y adaptada a la realidad socioeconómica de las Baleares».
Según ha informado la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural, en la sesión se presentaron los datos de seguimiento del esfuerzo pesquero mediante los posicionadores electrónicos –cajas verdes–, y se abordaron temas como la propuesta del Govern para establecer una talla mínima de la ‘cerviola’ o la iniciativa del Consell de Formentera para modificar las reservas marinas de la isla.
La Cofradía de Sant Antoni planteó la modificación del periodo de calada de los aparejos para la captura de langosta, mientras que la Fundación Marilles anunció la celebración de un curso sobre buenas prácticas para liberar tiburones y rayas capturados accidentalmente.
En cuanto al Plan de Gestión para la Pesca con Artes de Tirada Tradicionales, la Dirección General de Pesca ha presentado los resultados de la campaña 2024-2025, con capturas que superan las 27 toneladas de pescado y un valor total de más de 290.000 euros. Asimismo, se ha informado sobre la solicitud de una nueva prórroga a la Comisión Europea para mantener la excepción prevista en el Reglamento (CE) 1967/2006.
«Estos espacios de cogestión, integrados por administraciones, cofradías, científicos y entidades ambientales, son una herramienta esencial para garantizar la sostenibilidad ambiental, económica y social de la pesca artesanal en Baleares», han explicado desde la Conselleria.