
LOGROÑO, 25 (EUROPA PRESS)
La central agraria UAGR-COAG ha reclamado ayudas «compensatorias» y «preventivas» a la Consjería de Agricultura del Gobierno de La Rioja para para paliar y prevenir los efectos del fuego bacteriano en los frutales de pepita.
En un comunicado, desde la Unión recuerdan que «desde septiembre de 2024 llevamos alertando a los responsables de la Consejería del aumento de la afección del fuego bacteriano en nuestra comunidad, provocando mucho trabajo e importantes pérdidas a los fruticultores».
En aquel momento, señalan, «se estaban elaborando los presupuestos de agricultura para 2025, por lo que desde la Unión se solicitó la creación de una partida presupuestaria para un «Plan de choque del fuego bacteriano» en las propuestas agrarias enviadas a todos los Grupos Parlamentarios, iniciativa que puede derivar en un futuro Plan Estratégico de la pera conferencia riojana».
Además, desde el sindicato «se solicitó al Ministerio de Hacienda la reducción del índice del rendimiento neto para la pera en toda la DOP Peras de Rincón de Soto, de cara a la declaración de la RENTA de este año». «Una cuestión -dicen- que ha sido atendida en parte, por lo que recientemente se ha solicitado corregir los errores detectados al dejar fuera de la Orden ministerial varios pueblos riojanos».
Del mismo modo, en las reuniones de seguimiento mensuales que se realizan con la consejera de Agricultura y sus directores generales, «los representantes de la Unión han recordado la necesidad de abordar este creciente problema».
En este marco, tras el último de estos encuentros, el viernes pasado, desde la central agraria han apuntado que «se reclamarán ayudas compensatorias por el daño causado por esta enfermedad, así como ayudas y medidas para prevenir la expansión de la enfermedad».
En concreto, «la ayuda compensatoria debería establecer cantidad fija por hectárea en parcelas con afección superior al 30% para compensar los gastos de arranque, quema y replantación, si la ayuda se solicitara para la replantación de la totalidad de la finca, el módulo debería de ser mayor».
Dentro de las ayudas preventivas, la Unión propone «el establecimiento de fondos extraordinarios, más allá de los contemplados en los Planes de Mejora, para aumentar la subvención a la inversión en mallas antigranizo, elementos que previenen las heridas que facilitan la entrada de la enfermedad».
«Ante la necesidad de extremar la vigilancia y el control de la enfermedad en campo, detectando árboles infectados y actuando en consecuencia», la UAGR solicita que «se destine más personal público a estas tareas, que se arranquen todas las plantaciones abandonadas o en mala situación, ya que suponen un riesgo de trasmisión de la enfermedad, y vigilar las propiedades privadas de uso no exclusivamente agrario, destinadas a huertas de recreo u ocio, que en ocasiones pueden suponer un riesgo».
Suman «establecer protocolos más exhaustivos de control del material vegetal en vivero, para que dicho material no sea portador de la enfermedad; subvencionar también los tratamientos fitosanitarios preventivos, ya que pueden llegar a ser un gasto elevado para la explotación, tratamientos curativos hoy en día no existen, por lo que se demandan estudios de nuevas materias activas que pudieran emplearse».
Y, por último, plantean «mejorar los sistemas de alerta tempranos y los modelos predictivos de la enfermedad, ya que en este campo hay mucho camino que avanzar y sistemas que poner a disposición de los propios agricultores».