Hace unas semanas, una casa de jengibre gigante apareció de manera inesperada en Los Ángeles. Se trataba de una obra de Disney+ y Hulu con la que decidieron conmemorar por todo lo alto el 35.º aniversario de la película más representativa y nostálgica de la Navidad, “Solo en Casa”.
Inspirada en la emblemática casa de los McCallister que aparece en las dos primeras películas de la saga, esta versión se fabricó con 2580 kg de harina para todo uso y más de 4.200 huevos, alzada con 4400 ladrillos de pan de jengibre y 800 tejas. Ingredientes que se unieron con 75 litros de pegamento comestible, y se remataron en la fachada con 9 kg de fondant.
La casa se horneó con unas impresionantes dimensiones de 17,6 metros de largo, 12,8 metros de ancho y 7,8 metros de alto, que reproducen de manera precisa la casa “ficticia” de la familia de Kevin McCallister, ahora en una iteración comestible que se construyó en tan sólo 8 días.
La instalación estuvo abierta al público los días 18 y 19 de diciembre, dando la oportunidad a los fans de la película de adentrarse en la casa y apreciar en directo detalles como la famosa estatua del camino de la entrada, o el coche de reparto de la pizzería Little Nero que entrega la «Lovely Cheese Pizza» de Kevin.
Más allá del entusiasmo que ha despertado, la casa de jengibre marcó un hito convirtiéndose en la más grande del mundo, batiendo un récord mundial Guinness el 18 de diciembre, superando la marca anterior establecida en 2013.
