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Juvé & Camps sube un 4% ventas y prepara el lanzamiento de un cava rosado Gran Reserva

Una de las cinco mayores empresas catalanas del sector del cava ha cerrado el ejercicio 2023-2024 con una facturación de 26,7 millones de euros.

Juvé & Camps, una de las cinco mayores empresas catalanas del sector del cava, cerró el ejercicio 2023-2024 con una facturación de 26,7 millones de euros, un 4,4% más que el año anterior, y duplicó con creces su beneficio neto hasta 659.261 euros, frente a los 298.369 euros de 2022-2023. El ebitda creció cerca de un 20%, alcanzando los 1,9 millones. Las ventas correspondieron exclusivamente a vinos espumosos, con el mercado español representando el 85% de los ingresos, mientras que el resto provino de países de la UE (4%) y del resto del mundo (13%).

El notable aumento del beneficio se explica por tres factores principales: la apuesta reforzada por cavas Gran Reserva de alto margen, como Reserva de la Familia, Milesimé y La Capella; el control de costes gracias a las 280 hectáreas de viñedos en propiedad que reducen la dependencia de compras externas; y el crecimiento del canal enoturístico, con experiencias de cata en la finca de Espiells que no solo generan ingresos directos elevados, sino que también fortalecen la marca a nivel internacional.

Aunque la empresa sigue muy concentrada en el mercado español, Juvé & Camps busca incrementar su presencia en países como Estados Unidos y Reino Unido, donde el cava premium tiene potencial para competir con el champán. En línea con esta estrategia, la bodega fue el proveedor oficial de cava en la Copa América de vela 2025 en Barcelona.

De cara al futuro, la firma prepara el lanzamiento de un cava rosado Gran Reserva elaborado con Pinot Noir y Xarel·lo Vermell, con un margen previsto superior a siete euros por botella. Además, espera que este 2025 todo su portafolio cuente con certificación ecológica, lo que abrirá oportunidades en cadenas especializadas en mercados como Alemania y Países Bajos, ampliando así sus horizontes más allá del ámbito local.

La compañía, con sede en Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona), está controlada en un 76% por Scranton, el hólding ligado a la familia Grifols y exdirectivos de la multinacional catalana, a través de J&C Prime Brands. Este grupo no formula cuentas consolidadas, pese a que posee el 100% de firmas como Propietat d’Espíells, Pagos de Anguix, Fincas Campos Góticos y Anoia Industrial. El restante 24% de J&C Prime Brands sigue en manos de Joan Juvé Santacana, actual presidente del grupo.