Gastro

Julita, una carta de amor a las abuelas

En este café-restaurante la comida tradicional se revisita bajo un enfoque contemporáneo.

Constantino Quero

Julita es el nombre que comparten las abuelas de Javier de Juanas y Laura Ilarraza, los fundadores de un restaurante cafetería en el que converger todas sus ideas culinarias e ilustrar la nostalgia que sienten por la cocina de sus abuelas. El dúo abriría las puertas de este proyecto culinario en junio de este año, llevando al barrio de Chamberí la calidez del hogar y la estetización de la tradición.

Constantino Quero

Evocando la esencia de un bistrot francés y del tradicional comedor de una casa, el restaurante se extiende a lo largo de dos salas (en dos alturas). En la inferior -a modo de café- se sirve el brunch, el desayuno y la merienda en servicio ininterrumpido, mientras que en la superior, se presenta el almuerzo con sabor familiar. Dos espacios acogedores revestidos en tonos pastel que mantienen la esencia del hogar, del mantel de tela, la decoración kitsch y la cubertería y cristalería vintage. Todo ello con un aspecto renovado que alimenta la narrativa del local.

El otoño en casa

Tras haber estrenado carta y concepto, Javier de Juanas y Laura Ilarraza, los cuales coincidieron en las cocinas del hotel Brach y comparten trayectoria en el grupo Dani García y el Hotel Santo Mauro, presentan la carta de otoño en la que vuelven a reflejar su pasión por la comida tradicional en base a una cocina artesanal de temporada. Una propuesta en la que brillan la técnica y el producto con la que evolucionan de manera conjunta con platos más elaborados y completos.

Los sabores de la casa se materializan en platos cremosos, llenos de sabor y profundidad como un risotto de carrillera ibérica, una ensalada templada de pimientos confitados con ventresca de atún o un canelón de cabracho y gambas. No sin antes haber abierto boca con la tapa estrella: la Gilda especial con bacalao ahumado y gel de caramelo de pimiento.

En la carta, los guisos se reinterpretan con elaboraciones como las pochas con berberechos o el pollo en escabeche con puré de apionabo, para acabar con un pase dulce de tarta de la abuela con cremoso de chocolate y crema pastelera, un flan de vainilla o el arroz con leche, canela y lima. En la casa de Julita, cuanto más cantidad mejor.

📍 ¿Dónde? Joaquín María López, 46 · 28015 Madrid.