Suena ya la marcha fúnebre y se tiñe de negro la calle. El carnaval llega hoy a su fin con el Entierro de la Sardina. Se suceden en los carnavales parodias de entierro en los que los carnavaleros desfilan de luto simulando un cortejo fúnebre. La sardina se entierra entre ironías y un poco de humor pero nosotros preferimos comérnosla. Entierro de la sardina: dónde comer las mejores de España.
Málaga
Cómo no, teníamos que empezar por Málaga. Cuenta que hace más de 100 años en la playa malagueña de El Palo un pescador inventó el espeto al ensartar una sardina en una caña. Una receta de naturaleza humilde que el tiempo y el producto han elevado hasta hacer de él un plato digno de estrella Michelín. Pero, sin duda, lo mejor sigue siendo zampar espetos a pie de playa en un chiringuito.
Para eso, uno de los números uno actualmente es El Caleño. Situado en el Paseo Marítimo El Pedregal ofrece los mejores espetos de sardinas y boquerones. Los sirven también de calamares, calamaritos, salmonetes y jureles. Otra de sus especialidades es el marisco con la concha fina y la coquina, sin olvidarnos de sus arroces.
El restaurante El zagal también es otra de las mejores opciones para degustar los clásicos espetos. Se encuentra en el barrio de El Palo y fue fundado en 1975 como taberna. Se ofrecen uno de los mejores espetos de sardinas de Málaga y buen pescaíto frito del día.
Las xoubas gallegas
Si hay alguien tan aficionado a las sardinas como los malagueños son los gallegos. Las xoubas son algo más pequeñas y también se las conoce como sardinillas o parrochas. En el noroeste es tradición comerlas en forma de empanada con su típica salsa de pimiento verde y cebolla: la zaragallada.
Algunos de los grandes chefs nacionales han hecho de esta empanada un arte. Tal y como lo hizo Pepe Vieira en 2019 con su elaboración. Sin embargo, para los más tradicionales proponemos Pedro Roca en Santiago de Compostela. Una empanada de harina de maíz y sardinas que es un viaje al corazón de la gastronomía gallega.
Santurce, País Vasco
En el puerto pesquero de Santurce la sardina es una religión. En el Restaurante Hogar del Pescador de la Cofradía de Pescadores se sacan las parrillas a la calle y las sardinas llegan a docenas directas desde las barcas a tu plato. Un templo en el que rendirle culto y llorar el Entierro de la Sardina.
Madrid
En Madrid el espeto también es un plato codiciado. Y aunque no esté frente al mar, La Pesquera es uno de los mejores locales de la capital para comer espetos. En plena casa de campo, este restaurante custodiado por murallas sirve las sardinas ensartadas pero también a la brasa y todo ello al más puro estilo andaluz.
En lata: Casa Santoña
Hay ocasiones en las que sentarnos en una terraza con el olor de la parrilla y del mar no es posible. Para los que las prisas y viajar no son una opción, tenemos otra forma de comer sardinas: en lata. Conservadas en aceite o en salazón las mejores sardinas vienen del Cantábrico. Santoña refleja toda la tradición conservera de la región y sus anchoas son famosas por ello. Casa Santoña elabora latas de 900 gramos o semiconservas que son ideales para cualquier aperitivo.
Bonus track: «La caja más Cuca» en casa
Comer sardinas en casa para poner fin al carnaval y dar paso a la cuaresma con un toque muy gourmet. Jesús Sánchez, del Cenador de Amós (tres estrellas Michelín y tres Soles Repsol), ha creado junto con Cuca algo más que una caja de conservas. «La caja más Cuca» aúna tradición, calidad y artesanía.
La caja se compone de sardinillas pescadas en el Atlántico y elaboradas en Cabo de Cruz, berberechos, mejillones y bonito del norte capturado en las costas del Cantábrico mediante artes de pesca tradicionales. Toda una experiencia que viene acompañada por #RecetasconlaGorra, toda una fuente de inspiración para hacer recetas de la mano del gran chef.