La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) declarará este jueves a las 10.00 horas ante la Audiencia Nacional en el caso del cártel de la leche, en el que reclama la cantidad no pagada a los ganaderos que se vieron afectados por la fijación de precios en la industria entre los años 2000 y 2013.
En concreto, UPA, representada por el bufete de abogados de Eskariam, canaliza en total las demandas de más de 5.000 ganaderos y exige también los intereses acumulados en estos últimos 10 años.
Según los cálculos de la organización, se estima que los daños económicos por el caso del cártel lácteo superan los 1.200 millones de euros.
CONDENA DE LA CNMC EN 2015
En 2015 la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) multó a las industrias lácteas con 88,2 millones de euros por prácticas contra la competencia. En su momento, esta fue la cuarta multa de mayor cuantía en la historia de la CNMC.
En total, se sancionaron a dos asociaciones y nueve empresas, entre las que estaban Danone, Puleva, Calidad Pascual, Nestlé, Senoble Ibérica, Central Lechera Asturiana, Gremio de Industrias Lácteas de Cataluña, Asociación de Empresas Lácteas de Galicia y Central Lechera de Galicia.
A raíz de esta sanción, UPA reclama ahora que se devuelva «el dinero usurpado» a los ganaderos a causa de esas prácticas reconocidas por la CNMC como anticompetitivas.
De hecho, la resolución de la comisión reconocía que el objeto de esta actuación era distorsionar el normal funcionamiento del mercado y que produjo efectos negativo, siendo la industria ganadera el sector más perjudicado.