No es obligatorio sellar el amor de una boda con una tarta más que el altar. Y es un hecho que Selena Gomez (Texas, EE. UU., 33 años) ha dejado muy claro. En su cercano compromiso con Benny Blanco -evento que aún no han empezado a organizar-, tiene claro que lo convencional no es una cualidad invitada a esta ceremonia. En una reciente entrevista compartida por su marca Rare Beauty, la cantante y actriz reveló algunos detalles sobre cómo imagina su gran día y os aseguramos que la comida será divina.
Aunque aún no tienen fecha ni planes concretos, Selena ya tiene una cosa clara: nada de tarta gigante. Prefiere algo más íntimo y personal. “Quiero una tarta pequeñita solo para nosotros dos, que podamos congelar”, confesó. Y si hablamos de su verdadero “postre ideal”, ella lo tiene clarísimo, las galletas con salsa de su abuela: “Eso para mí, sí es un postre”.
La pareja, que se comprometió en diciembre de 2024, aún no ha comenzado a organizar la boda, y no por falta de ganas. Según contó Benny en el pódcast Therapuss with Jake Shane, ambos han estado tan ocupados con proyectos, rodajes y giras, que no han tenido tiempo ni de sentarse a planear. Pero él asegura que están felices y que el gran día llegará cuando todo encaje. “Este verano tal vez nos sentemos y digamos: ‘Ok, ¿qué hacemos?’”, comentó.
Y si de planes relajados se trata, Blanco ya adelantó el estilo de celebración que prefiere algo sencillo, sin estrés. El vínculo entre ellos parece estar lleno de complicidad y cariño. “Con Selena puedo pasar el día entero en la cama. Nos encanta ver cosas, comer, rodearnos de comida y disfrutar cada momento”, contó el productor con ternura.
La comida, de hecho, ha sido un ingrediente clave en esta historia de amor. Para San Valentín, Benny preparó una cita al timón de Taco Bell, nachos como en el cine, pepinillos fritos traídos desde Texas, Hot Cheetos y los dulces favoritos de Selena. Incluso, un año después, le preparó una bañera llena de queso fundido con nachos para mojar. Con este nivel de originalidad (y sabor), no hay duda de que esta boda, cuando llegue, será deliciosa e inolvidable.