La semana más castiza acaba de llegar a Madrid. Las fiestas de San Isidro se inauguran un año más para hacerle honor a su santo patrón y activar toda una programación de shows, actividades y experiencias gastronómicas con las que adentrarse de lleno en la cultura madrileña. Recopilamos para la ocasión los planes culinarios que harán que esta fecha sea inolvidable.
Zalacaín
Maison Bollinger llega un año más a Zalacaín para homenajear de manera conjunta esta festividad con una propuesta de alta cocina vinculada a la tradición. En forma de tributo al espíritu castizo, el chef Jorge Losa ha diseñado un menú -disponible hasta el 15 de junio- que recupera sabores de siempre con una mirada contemporánea y sofisticada, maridada con el champagne Bollinger Special Cuvée caracterizado por sus suculentas notas de fruta madura, especias y pan brioche.
El menú de S.S se abre con una croqueta de ternera de Guadarrama y Welsh Rarebit para seguir con el clásico Búcaro don Pío y un ravioli de setas, trufa y foie. A continuación, el restaurante sirve el lenguado sobre colmenillas a la crema con salsa de albahaca para acabar con los míticos callos Zalacaín. La experiencia se cierra de manera dulce con un lacado de chocolate con avellanas y sorbete de fruta de la pasión, seguido de una selección de tejas y mignardises, acompañadas de cafés e infusiones.
Egun-On
Edu Collado del restaurante Egun-On no ha querido perderse la fiesta con una propuesta que mezcla recetas castizas tradicionales con innovadoras reinterpretaciones en las que entremezcla su alma vasco-gallega.
Los miércoles, el restaurante servirá su clásico cocido madrileño del que nacen unas originales croquetas de cocido con mermelada de piparras. Completan la propuesta otras reinterpretaciones como las croquetas de rabo de toro, las patatas bravas de Blas y la oreja de cerdo, cocinada a baja temperatura. Como broche final: las manitas de cerdo al curry rojo, una reinterpretación de la receta madrileña que incorpora el exotismo del sudeste asiático.
Viva Madrid
Viva Madrid, una de las tabernas centenarias más míticas de la capital, ha querido celebrar San Isidro por todo lo alto con música, chotis con chulapos y claveles para todo aquel que tome el aperitivo.
Hasta el 18 de mayo de 2025, se podrá disfrutar en el bar de su aperitivo especial San Isidro con su tabla de aperitivos que incluirá un mini bocata de oreja brava a la madrileña en pan de brioche, una croqueta de cocido madrileño hecha con todo el compango, un torrezno confitado y frito con piparra, y una ensaladilla rusa con salmón ahumado sobre regañá.
Turris
Las rosquillas no pueden faltar en San Isidro, y Turris lo sabe. Para ello, ha creado cinco versiones del dulce: las clásicas “tontas” (las de siempre, sencillas y auténticas sin glaseado) y “listas” (cubiertas con un glaseado de huevo y azúcar), junto a tres iteraciones creativas. Es decir, las de chocolate con almendra, las de limón y las de pistacho: la gran novedad de este año, con una cobertura de glaseado de pistacho.
Además, este año, la marca lleva la tradición más allá del obrador con un pack especial de picnic para celebrar la fiesta más castiza con un picnic al aire libre. Éste incluye una tote bag con una bolsa de rosquillas, un plumcake esponjoso, y una hogaza rústica de 1 kg y unos snacks hechos de una masa de pan crujiente. Para completar la experiencia, un mantel de picnic que crea el escenario perfecto para disfrutar al aire libre, junto a una botella de picnic.
Mahou
La bebida que marida a la perfección con la experiencia San Isidro es una buena Mahou, que llega este año con un homenaje especial: una Mahou Cinco Estrellas que ensalza la ciudad y le cede el logo a Madrid con el clavel como protagonista.
La botella con el diseño lleno de claveles ya puede encontrarse en la mayoría de bares de la Comunidad de Madrid.
