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¿Un buen café es tu perdición? Te enseñamos cuatro nuevas maneras de prepararlo

Todos sabemos preparar el café en la cafetera de toda la vida, la llamada italiana o Moka, y también sabemos prepararlo con los polvitos instantáneos. Incluso sabemos pedir una buena taza de café con leche en la cafetería de abajo y un cortado después de comer. Pero lo que quizás no sabías es que hay muy variopintas maneras de preparar el café en casa que pueden hacer de tu café de la mañana (y de la tarde) una experiencia nueva. Aquí las tienes:

Cafetera de émbolo manual o francesa: es un método poco utilizado en países como España, pero se ha vuelto muy popular para degustar cafés de alta gama. El café resultante es uno con mucho cuerpo y un sabor intenso. Para un mejor sabor se recomienda moler los granos de café justo antes de usarlos.

Sistema de goteo o cafetera americana: en Estados Unidos es la cafetera más común que hace pasar los granos de café por un filtro para después caer gota por gota a un recipiente más grande desde el que se sirve el café en tazas individuales. Lo has visto en las películas seguro. Para disfrutar de esta manera de preparar café ni siquiera hace falta una cafetera. Con un cono de goteo, filtros y una taza tienes todo lo necesario.

Cafetera espresso: sí, esta es la que tienen todos los bares y restaurantes y sí, es por eso que el café sale tan bueno. Buenas noticias, tú también puedes tener una de estas máquinas (en versión mini, eso sí) en tu cocina. Estas maravillas preparan un café cremoso, intenso y con mucho cuerpo.

Cafetera de sifón: esta fue una forma muy popular de preparar café en el pasado, aunque ha perdido algo de fuerza por la complejidad del sistema, los amantes del café lo alaban por el sabor lleno de matices y el café limpio que produce. Aquí tienes la explicación de este método: dos recipientes, el de abajo lleno de agua y el de arriba lleno de granos de café molidos. Dando calor al agua esta se vaporiza y entra al recipiente superior por un estrecho tubo, cuando la temperatura baja y el gas se contrae, el líquido vuelve a bajar pasando por un filtro y voilà el café esta listo.